Montserrat Garcia, entrevistada en el diario El Punt Avui

La periodista Laia Bruguera, redactora de educación del diario El Punt Avui, realizó una entrevista a Montserrat Garcia, creadora y fundadora de Glifing. La entrevista fue publicada el viernes 27 de enero de 2023 en la sección Protagonistas del diario en papel, y ocupó también un espacio en su portada y en la versión digital del diario.

A continuación, se puede leer la entrevista completa:

Montserrat Garcia, fundadora de Glifing: «Cada niño trabaja al ritmo que le hace falta».
La psicóloga Montserrat Garcia es la creadora del método de aprendizaje y entrenamiento de la lectura Glifing. Lo empezó a desarrollar con la Universitat de Barcelona (UB) para ayudar a su hijo disléxico y al poco tiempo se dio cuenta de que servía para mejorar la velocidad de lectura, la comprensión y la memoria de todos los niños, fuera cual fuera su nivel. Hoy lo usan escuelas, gabinetes de psicología y familias de más de 20 países. El método acaba de ser reconocido por los premios SEK Lab Awards como una de las start-ups más innovadoras en el campo de la educación.

– Con seis años, su hijo pequeño le preguntó qué tenía que hacer para trabajar. No quería ir a la escuela.
A Mario le costó mucho toda la primaria. Dio clases de refuerzo y estuvimos muy bien atendidos por la escuela y las psicopedagogas con quienes trabajamos, pero no fue suficiente. Teníamos el diagnóstico de bloqueo emocional, pero muchas veces se confunde la consecuencia con la causa. El bloqueo era el resultado de su sufrimiento, de ver que no podía con las tareas que le pedían. Cuando cumplió los diez años, por fin tuvimos el diagnóstico de dislexia y es entonces cuando nos pudimos centrar en el problema de base. Como tenía problemas con el proceso de descodificación lectora, llegó a sexto de primaria leyendo como un niño de primero. Esto provoca mucho sufrimiento y una autoestima por los suelos.

– E ideó un sistema para trabajar la lectura. ¿Cómo fue?
Tuve la suerte de que en la Universitat de Barcelona (UB) me ayudaron mucho y lideraron aquel proyecto. Yo llegué con un problema, y este fue el motor, el detonante. En la UB encontré el lugar donde acceder a todos los documentos científicos, pero de manera filtrada, con una guía. Y salimos adelante con un método de entrenamiento lector porque gracias a la ciencia sabíamos mejor que nunca como leía el cerebro, conocíamos y diagnosticábamos las dificultades de aprendizaje también mejor que nunca y además teníamos las nuevas tecnologías que nos permitían ofrecer un formato agradable y, lo más importante, totalmente personalizado. Los libros son los mismos para todos, Glifing es el libro de Harry Potter, y es diferente en función de quien lo abre, porque cada cual recibirá las sesiones y también el contenido que necesita: si tienes un niño de sexto que lee como uno de primero, no le puedes poner Caperucita Roja.

– La lectura se entrena con juegos de ordenador. ¿Por qué?
Mario, como tantos otros niños con problemas en la escuela, estaba enrabiado con todo lo que era académico, así que la manera de captar su interés era ofreciéndole un formato digital. La idea era que le pediríamos un esfuerzo importante porque le haríamos leer cosas que no leía bien y le iríamos pidiendo algo más cada vez, pero como mínimo se lo daríamos en un formato que no le generara rechazo sino todo lo contrario.

– ¿Cuándo vio que aquel sistema podía ayudar a otros muchos niños?
En la mitad de su entrenamiento, mi hijo hizo un salto impresionante. Ni me lo creía. Lo probamos con niños con dificultades de varias escuelas de Barcelona y confirmamos que funcionaba. Y enseguida decidimos hacer material no solo para los que se quedaban encallados sino para todos, también para los que seguían bien el nivel. Así también trabajamos la inclusividad, porque ya no tienes niños con problemas que salen del aula para hacer refuerzo sino todos trabajando la lectura, cada cual con el ritmo que necesita. Eso es justicia.

– Las dificultades de lectura explican hasta el 60% del fracaso escolar. ¿Somos suficientemente conscientes?
Creo que cada vez somos más conscientes, otra cosa es que queramos poner remedio o no. Las escuelas deberían tener libre acceso a un sistema como este, que es muy barato, pero cuesta que la administración colabore.

– El Ministerio de Educación de Chile os contrató.
Sí, en época de pandemia, para atender a 10.000 niños. Este año también la administración pública argentina ha puesto en marcha el sistema para 12.000 niños con dificultades de lectura. Es una lástima que administraciones externas confíen en nosotros y en nuestro propio país no nos esté pasando. En nuestro país está triunfando un sistema de aprendizaje de matemáticas también con juegos de ordenador. Creo que lo que pasa es que todo el mundo cree que está capacitado para enseñar a leer. Pero si fuera tan fácil no tendríamos entre un 30% y un 50% de los niños que leen por debajo o muy por debajo de lo que tendrían que leer. Y es la base de muchos problemas. Hay veces en que niños que no saben leer pasan inadvertidos y los profesores no lo detectan, como en el caso de los niños muy inteligentes, porque tienen recursos y lo van trampeando, pero los problemas están y tienen consecuencias importantes.

– ¿Y qué diría a los padres que creen que en las aulas hay demasiadas pantallas?
Un cuchillo puede matar y no por eso dejas de enseñar a tu hijo cómo se usa. Herramientas como la nuestra y otros programas educativos son la mejor manera de aprender a usar las nuevas tecnologías. No crean adicción, sino que simplemente hacen el camino del aprendizaje lo más placentero posible y sobre todo de manera totalmente personalizada, dando a cada cual exactamente aquello que necesita.